El artículo que a continuación de nuestros comentarios les ponemos fue publicado por el diario La Razón en julio del 2005, y en el se explican las políticas de la ONU para solucionar el hambre en "el tercer mundo", sus intenciones y tareas para bajar la alta tasa de mortalidad infantil.
La verdad es que la solución de la ONU no puede ser más efectiva: mata al niño antes de nacer y asi no tendrás que sumar una muerte infantil más, ya que el embrión, la persona en formación, no cuenta como niño. (ya nos explicarán por qué).
La cosa está clara, pero, ¿por qué empezar la tarea cuando la mujer ya está embarazada?, hagamos estériles a los habitantes de ese mal llamado tercer mundo, que no tengan opción a quedarse embarazadas, asi solucionamos el problema en parte. Si a eso acompañamos una politica de eutanasia obligatoria, es decir, todo mayor de, no se, setenta años, (no setenta años no, que en los paises más pobres de Africa son pocos los que alcanzan setenta años), digamos mejor cincuenta años, a la primera vez que vaya al hospital, zass, chute y sobredosis. Menos bocas que alimentar.
No se porque la ONU me trae recuerdos de otros que también quisieron mejorar la raza a base de crímenes monstruosos. Eso de gastarse miles de millones en pastillas abortistas, succionadores y equipos quirúrgicos y personal sanitario para provocar abortos en vez de gastarlo en medios de supervivencia y comida no parece que sea la solución más humana, tal vez si sea la más radical; "si conseguimos que no haya niños no habrá mortalidad infantil, y además menos bocas para comer y con el tiempo solucionado el problema".
Esa parece que es la politica de la ONU, de esa ONU que condena o aprueba las matanzas de las guerras dependiendo de quien las empiece, esa ONU para la que nosotros, los católicos somos su mayor enemigo, porque nosotros si queremos a la vida, si protegemos a la vida.
Hay quien ufano se pavonea de colaborar con la ONU. Nosotros no, nosotros no podemos ser cómplices de gente que alienta y colabora con la terrible tragedia humana que significa el aborto, nosotros no podemos colaborar con los asesinos de bebes humanos, aunque se escondan bajo la bandera de la ONU, nosotros condenamos esas políticas de exterminio que tan solo procuran acabar con el más débil.
Lean a continuación el artículo en cuestión, y opinen:
ONU: Propone contra la pobreza el aborto libre, pero no alimentos ni equipos médicos básicos
Bioética-Ciencia - Defensa de la vida
escrito por diario La Razón (Madrid) 13-07-05
Preservativos, píldoras para el control de la natalidad, DIU's y un aspirador manual para abortos por succión. Este es el «kit de salud reproductiva» que el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) distribuyó a cerca de cuarenta mil personas en 1999 en los campos de refugiados de Kosovo.
Mientras tanto, decenas de médicos que trabajaban allí denunciaron la falta de aparatos de rayos X, ecógrafos, vendas, suero, medicamentos, tensiómetros e incluso alimentos. Y sin embargo, tenían «todo lo que se necesita para el control de los nacimientos, esterilizaciones y abortos».
El último informe publicado hace dos semanas por este organismo, titulado «Reducir la pobreza y lograr las metas de desarrollo del Milenio: argumentos para invertir en salud y derechos reproductivos», ha levantado las iras de los cientos de grupos pro vida que trabajan diariamente en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York.
La ONU camufla el aborto bajo el término "salud reproductiva".
El polémico informe argumenta que la «salud reproductiva» es necesaria para erradicar la pobreza y el hambre, para combatir el sida, y también para garantizar un crecimiento sostenible de la población.
Remediar la mortalidad infantil... matando a los niños en edad prenatal.
El documento también sostiene que esta «solución» puede acabar con la mortalidad infantil, amén de elevar el nivel educativo en los países menos desarrollados del Tercer Mundo.
Y es que el aborto –ahora más generosamente llamado «salud reproductiva»– es la bomba de relojería que hace crispar permanentemente los ánimos y los acuerdos, pues los grupos que defienden el derecho a la vida del no-nacido y los apodados pro familia fueron excluídos de las negociaciones previas.
El embajador de EE UU ante Naciones Unidas presentó una queja formal al Presidente de la Asamblea General de este organismo porque todos los grupos admitidos a las mesas redondas militan sin sonrojos en la izquierda y se dedicaron a pronunciar discursos oficiales a favor de los derechos del lobby gay y del aborto libre.
Enemigo número uno para la ONU: la Iglesia Católica.
Pero, desgraciadamente, no son los únicos excluidos en los pasillos de la ONU. Sandro Magister, vaticanista del conocido semanario italiano «L'Espresso», explicaba que «los representantes permanentes de la Santa Sede en la ONU son frecuentemente tratados allí como el “enemigo número uno”, en cuanto representantes de una religión considerada como generadora de intolerancia». En la práctica, Magister subraya que la Iglesia Católica es excluída por «oponerse a la filosofía de los “derechos reproductivos”, que es el verbo indiscutible dentro de Naciones Unidas y de la Unión Europea en todas las materias que tengan que ver con la familia y la procreación».
La periodista Eugenia Rocella, autora del libro «Contra el Cristianismo: La ONU y la UE como nueva ideología», denuncia que «los “derechos reproductivos” se han concretado en el control de los gobiernos sobre la fertilidad femenina en una política de difusión mundial del aborto, de la contracepción y especialmente de la esterilización».
jueves, 11 de septiembre de 2008
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