Más de 400.000 familias se quedarán sin cheque-bebé en 2011
El cheque-bebé, que tantos quebraderos de cabeza dio al entonces ministro de Economía, Pedro Solbes, para cuadrar las cuentas de los presupuestos, tiene sus días contados. Apenas tres años ha durado la medida que otorgaba 2.500 euros a cada familia por el nacimiento o adopción de un hijo. Una cantidad que se incrementaba en 1.000 euros más si se trataba de una familia monoparental, numerosa o si el pequeño padecía alguna discapacidad.
Cuando el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero anunció que todos los bebés nacidos o adoptados a partir del 1 de julio de 2007 recibirían esta ayuda, muchos la calificaron de «electoralista» (las elecciones de 2008 estaban a la vuelta de la esquina) y de un parche que no abordaba las verdaderas necesidades de la familia española.
Cualquiera podía solicitar esta ayuda, independientemente de su renta. El único requisito era haber residido en España de manera continuada durante dos años antes del nacimiento del bebé. Se podía cobrar por vía fiscal (como una deducción en la cuota del IRPF), o como una prestación no contributiva de la Seguridad Social, siendo esta última la única forma de cobro en el País Vasco y Navarra, con sistema fiscal propio.
En 2008, más de 490.000 familias cobraron este cheque, lo que supuso un desembolso de más de 1.200 millones de euros, una cifra que el Gobierno se ahorrará a partir del 1 de enero de 2011, fecha anunciada por Zapatero como la del fin de la prestación. Es decir que aquellas familias que hayan concebido a su hijo antes del pasado marzo y tengan previsto que nazca en diciembre de 2010 serán las últimas en cobrarlo.
Una medida insuficiente
¿Pero era realmente necesario eliminarlo para ahorrar? Desde el Foro Español de la Familia consideran que existen otras partidas de las que recortar como la que irá destinada a financiar la nueva ley de aborto «que requiere muchos fondos públicos para Educacion y Sanidad». «Eliminan el cheque-bebé, que ya nos parecía insuficiente como política de ayuda a las familias, mientras que aumentan el gasto público en torno al aborto o con políticas de perversión sexual en las escuelas, ajenas a la familia y al derecho de los padres a educar a sus hijos, desarrolladas por el Ministerio de Igualdad», critica el director del Foro Español de la Familia, Ignacio García Juliá en declaraciones a ABC.es. En esta línea, García-Juliá cree que sería más rentable eliminar el Ministerio de Igualdad, «que fue creado para introducir una ideología que contribuye al desmembramiento de la familia».
La presidenta de la Federación Española de Familias Numerosas, Eva Holgado, también critica la eliminación del cheque bebé porque «hay muchas más políticas que adoptar antes que quitar prestaciones a las familias». En declaraciones a Servimedia, la presidenta de esta federación reconoce que, «en su día», criticaron la medida por considerarla «absolutamente populista». «No era lo que necesitábamos», añadió. Sin embargo, criticó que se haya decidido eliminar esta ayuda de 2.500 euros por nacimiento o adopción en plena crisis. «Ahora nos parece mal, porque en el fondo es una ayuda a la familia en épocas de crisis. La familia con hijos, y no sólo las numerosas, no es el colectivo donde precisamente haya que restringir las ayudas», subraya. En su opinión, «hay mucho más que hacer antes que quitar prestaciones a familias que tengan hijos, con independencia de que sean numerosas o no».
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